El 8 de agosto, Lee Young-ji anunció en su cuenta personal de redes sociales: “El regreso de ‘No Prepare’. Reunámonos alrededor de la mesa y tomemos una copa”.
El popular programa de entretenimiento web, “No Prepare”, presenta a Lee Young-ji manteniendo conversaciones íntimas con celebridades mientras disfruta de bebidas. El programa ha recibido a una amplia gama de invitados, como Park Bo-young, Kim Hyang-gi, Jisoo de BLACKPINK, Jay Park y Karina de aespa. A medida que las estrellas muestran sus encantos únicos mientras conversan con Lee Young-ji, el programa ha ganado un inmenso amor del público.
Tras el anuncio de su regreso para la temporada 3, “No Prepare” aumentó aún más la anticipación de los fanáticos al revelar a Lisa de BLACKPINK como la primera invitada.
A pesar de las reacciones positivas, también hubo reservas por parte de algunas personas. Con numerosos ídolos y celebridades que aparecen en el programa de bebidas alcohólicas, existe una preocupación válida sobre su posible impacto en los espectadores menores de edad. Los comentarios de los internautas incluyeron declaraciones como: «Puede que no sea adecuado para que lo vean estudiantes jóvenes», «Tal vez sería más apropiado que las celebridades bebieran bebidas no alcohólicas mientras conversan» y «No se deben pasar por alto los efectos nocivos de los programas de bebidas alcohólicas».
En la industria del entretenimiento han ocurrido con frecuencia incidentes desagradables relacionados con el alcohol. El 7 de agosto, la policía acusó a Suga de BTS de conducir un patinete eléctrico bajo los efectos del alcohol. Según la Ley de Tráfico, conducir un patinete en estado de ebriedad con una concentración de alcohol en sangre de entre el 0,08% y el 0,2% puede resultar en una pena de prisión de 1 a 2 años o una multa de entre 5 y 10 millones de wones. La concentración de alcohol en sangre de Suga estaba en un nivel que podría resultar en la revocación de su licencia.
Kim Ho-joong también fue acusado de conducir ebrio tras provocar un accidente de tráfico con un taxi que venía en dirección contraria. No solo intentó cambiar de conductor, sino que también consumió más alcohol, lo que dificultó medir con precisión su nivel de alcohol en sangre.
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