La FIDE ha impuesto una prohibición de cinco años de jugar al ajedrez competitivo a Andrejs Strebkovs, maestro internacional letón, debido a su acoso sexual a jugadoras jóvenes.
El comunicado de la organización sobre las medidas disciplinarias del 12 de agosto indicaba que, tras dos investigaciones, se determinó que Strebkovs había violado el Código Ético y Disciplinario de la FIDE. Como resultado, se le ha prohibido al jugador participar en cualquier evento de la FIDE como jugador y no se le permite estar físicamente presente en ningún evento de la FIDE en todo el mundo durante un período de cinco años.
Las investigaciones realizadas por la EDC revelaron que el maestro letón había estado involucrado en un preocupante patrón de acoso contra jugadoras de ajedrez durante los últimos diez años.
Según el comunicado, numerosas jugadoras, incluidas algunas de tan solo 14 años, fueron blanco de cartas indecentes que contenían contenido y objetos inapropiados. Estas cartas fueron enviadas a sus residencias, clubes, universidades y sedes de torneos.
La decisión disciplinaria reveló que Strebkovs era la fuente de las cartas, según lo determinado por el análisis de ADN durante la investigación.
El presidente de la FIDE, Arkady Dvorkovich, declaró que la organización no tolerará ningún tipo de acoso o abuso dentro de la comunidad ajedrecística, particularmente cuando hay menores involucrados.
Esta investigación y decisión se han ido gestando durante años.
A pesar de la reciente revelación, el escándalo se viene gestando desde hace algún tiempo, y tanto The Telegraph como el sitio de noticias ruso Meduza informaron sobre las cartas en 2022. Según el informe, varios de los jugadores que recibieron las cartas eran destacados competidores rusos.
La FIDE declaró que informó rápidamente de las cartas a la policía letona cuando se hicieron las acusaciones.
Según la FIDE, las autoridades letonas realizaron una investigación sobre Strebkovs, pero determinaron que sus acciones no violaron ninguna ley penal en Letonia.
La comunidad vuelve a criticar a la FIDE por el trato que da a sus miembros en comparación con sus homólogos masculinos. La FIDE y sus principales dirigentes han sido acusados en el pasado de aplicar normas sexistas y tomar decisiones tendenciosas contra las ajedrecistas.
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