¿Sabías que Disneyland cuenta con un exclusivo club privado para miembros llamado Club 33? Una pareja está tan ansiosa por recuperar su acceso a este establecimiento de élite que incluso ha ofrecido sus propios órganos a cambio de la oportunidad de disfrutar de una cena elegante.
Los parques y películas de Disney son conocidos por sus joyas ocultas, desde motivos de Mickey Mouse hasta clubes secretos para huéspedes selectos, como el Club 33.
Si bien muchos visitantes pueden no estar familiarizados con el Club 33, otros están tan decididos a conseguir una reserva que están dispuestos a hacer lo que sea necesario.
Este restaurante secreto de alta cocina, fundado en 1967, está inspirado en el Club 33 de Nueva Orleans, pero aplica normas estrictas, incluidas las relacionadas con la intoxicación en público.
En 2017, una pareja violó estas normas, lo que llevó a la revocación de su membresía. Siete años después, han gastado más de 400.000 dólares en honorarios legales e incluso propusieron donar un riñón a cambio de su reincorporación.
En respuesta a una entrevista con Scott y Diana Anderson, un fan en X/Twitter comentó: “Esto es lo más oscuro que he leído en una semana”. Otro usuario expresó su incredulidad ante la obsesión de la pareja y compartió su experiencia en el Club 33, donde una comida para dos adultos y tres niños costaba $600 sin alcohol, y señaló que el menú era similar al de un restaurante público de la planta baja.
A pesar de estas preocupaciones, los Anderson están comprometidos a luchar para recuperar su membresía después de pasar diez años tratando de ingresar.
Siguen cuestionando las afirmaciones de que Scott Anderson violó las políticas sobre consumo de alcohol, y la seguridad alegó que arrastraba las palabras y tenía dificultades para mantenerse en pie.
En un incidente anterior en 2016, Diana fue suspendida por “usar un lenguaje picante… un par de palabras con F”, como describió su abogado Sean Macias.
Según informó LA Times , la pareja perdió su demanda, lo que llevó a Diana a declarar que «vendería un riñón… No me importa».
Según se informa, la pareja gasta 125.000 dólares al año visitando el parque de Anaheim, con un promedio de entre 60 y 80 viajes anuales.
Disney aún no ha respondido a las afirmaciones de los Anderson ni a su demanda en curso sobre el Club 33.
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