Ha surgido un caso alarmante que involucra a una influencer de las redes sociales que, junto con su esposo, intentó contratar a una pareja para eliminar a un rival en línea. Si bien el esposo fue finalmente absuelto, la influencer enfrentó graves consecuencias y recibió la pena máxima por sus acciones.
Detalles del complot de asesinato por encargo
En octubre de 2024, la influencer Ashley Grayson fue sentenciada a 10 años de prisión federal por su participación en un plan de asesinato a sueldo. Las actividades delictivas se remontan a agosto de 2022, cuando Grayson, de 35 años, se puso en contacto con una exsocia y la invitó a Dallas con el pretexto de discutir un posible acuerdo comercial.
Durante la reunión, Grayson y su marido propusieron un plan impactante: querían que la pareja matara a su exnovio y a una mujer que la había criticado públicamente en Internet. Grayson prometió a la pareja 20.000 dólares por cada asesinato.
La evidencia revela intenciones
El 10 de septiembre de 2022, la mujer que Grayson reclutó grabó una videollamada que proporcionó pruebas cruciales en su contra. En esta grabación, Grayson expresó claramente su deseo de que mataran a su adversaria en línea, e incluso ofreció una bonificación de 5.000 dólares si el acto se podía realizar en una semana.
El conflicto entre Grayson y su rival comenzó en 2021 cuando la rival lanzó un negocio similar al de Grayson, lo que llevó su disputa en línea a un territorio peligroso.
Ashley Grayson no será elegible para libertad condicional después de su sentencia de 10 años de prisión.
Consecuencias legales e impacto en la comunidad
Un gran jurado acusó formalmente a Grayson y a su esposo en julio de 2023. Si bien su esposo fue absuelto, Grayson fue declarada culpable y sentenciada a la pena máxima en octubre de 2024. Después de cumplir su condena, estará en libertad supervisada durante tres años; sin embargo, debido a la naturaleza federal de los cargos, no tendrá la opción de libertad condicional.
El abogado Reagan Fondren brindó información sobre el caso y destacó la innecesaria escalada de rivalidades en línea hasta convertirse en violencia en el mundo real. Fondren comentó: “Este fue un crimen del siglo XXI en el que las disputas en línea y las rivalidades sin sentido se filtraron al mundo real. Aunque ninguno de los involucrados sufrió daños físicos, el costo emocional para la víctima y su familia fue significativo”.
Tendencias más amplias en las disputas en línea
La preocupante tendencia de los influencers a recurrir a la violencia en disputas online ha quedado de manifiesto en los últimos acontecimientos. En particular, otro YouTuber fue detenido por intentar asesinar a un rival, diciéndole a la víctima cosas como: «Esperaré a que mueras».
Las implicaciones de estos casos subrayan el peligroso potencial de que los conflictos en línea se extiendan a la realidad, poniendo de relieve la necesidad de rendición de cuentas en la era digital.
Deja una respuesta