Baldur’s Gate 3 ofrece varias opciones para jugar como un personaje malévolo, pero hay una clase en particular que te permite abrazar completamente el mal, gracias a tu capacidad de seleccionar una deidad.
Baldur’s Gate 3 no se adhirió al famoso sistema de alineación de Dungeons & Dragons. Al contrario de determinar el comportamiento de un personaje basándose en una elección al principio, los jugadores tienen la libertad de actuar como quieran, con la salvedad de que deben aceptar las repercusiones de sus elecciones.
Para aquellos que quieran jugar como un personaje malvado en Baldur’s Gate 3, el origen Dark Urge es la opción ideal. Ofrece una gran cantidad de opciones para comportarse como un asesino despiadado, incluida la capacidad de eliminar a los miembros de su grupo en cualquier momento.
A pesar de la creencia de que Dark Urge es inherentemente malvado, los jugadores tienen la capacidad de resistir su influencia. Sin embargo, en realidad es la clase Clérigo la que posee un verdadero lado oscuro, como se señaló en una discusión en Baldur’s Gate 3 Reddit. Curiosamente, seleccionar ciertas deidades etiquetará al jugador como Clérigo Malvado, a pesar de la ausencia de un sistema de alineación en el juego.
Un usuario aclaró: “En BG3, los diálogos de los clérigos se organizan según la alineación del dios elegido. En este caso, seleccionaste a Talos”. Otro usuario agregó: “Talos es conocido como el dios de las tormentas y la destrucción, y se lo considera una deidad del mal caótico. Como adorador de Talos, tu clérigo probablemente invocaría tornados y huracanes para destruir aldeas. Por lo tanto, tu clérigo está alineado con una deidad maligna”.
Si no estás bien versado en la historia de D&D mientras juegas a Baldur’s Gate 3, puedes elegir sin querer a un clérigo malvado. Sin embargo, Talos no es la única opción disponible, ya que algunas otras elecciones malvadas están vinculadas a determinadas razas jugables.
Un usuario señaló: “El tipo de dios que elijas tendrá distintos grados de moralidad. Por ejemplo, los clérigos de Tiamat, Talos, Lolth, Shar, Vlaakith y Laduger son vistos como dioses malvados de una forma u otra. Talos es venerado como el dios de la destrucción, que representa las fuerzas de la ruina y atrae seguidores que desean destruir. Como resultado, adorar a una deidad de la ruina te etiquetaría como un clérigo malvado”.
Afortunadamente, la elección de la deidad por parte del jugador no limita su capacidad para actuar como un personaje heroico. En Baldur’s Gate 3, es difícil estar atado a un camino en particular, lo que te permite jugar como un clérigo benévolo de Talos, el dios de la destrucción. Simplemente concéntrate en derrotar a los villanos y tu deidad no se opondrá.
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