Windows 11 ahora tiene soporte de aislamiento para aplicaciones Win32 heredadas para consumidores y usuarios comerciales. Según la compañía , los desarrolladores ahora pueden enviar sus aplicaciones usando un contenedor sandbox para aislarlas del resto del sistema operativo para proteger el sistema de malware y otras amenazas, mejorando así la seguridad.
El nuevo enfoque ayudará a evitar que los programas tengan acceso inesperado o no autorizado a subsistemas internos críticos, minimizando el daño a la configuración si una aplicación se ve comprometida. En otras palabras, esta nueva tecnología hará más difícil que los atacantes y los códigos maliciosos exploten las vulnerabilidades y se propaguen a otras aplicaciones o componentes del sistema operativo.
La nueva tecnología ahora está disponible como vista previa, pero no es una función que pueda habilitar en Windows 11. En cambio, es una función de seguridad basada en la base AppContainers que los desarrolladores deben implementar en sus aplicaciones. Microsoft está dedicando una página en GitHub con los recursos e instrucciones para que los desarrolladores comiencen a aislar sus aplicaciones.
Aunque esta es una característica nueva, no es la primera vez que la compañía intenta contener aplicaciones para mejorar la seguridad. Sandbox es una característica de las ediciones Pro, Enterprise y Education que crea un entorno de escritorio de Windows aislado que permite a los usuarios ejecutar aplicaciones que no son de confianza o navegar por páginas web que pueden ser maliciosas.
Además, Microsoft Defender Application Guard es otra solución que crea un entorno virtualizado que aísla una instancia de Microsoft Edge para navegar por sitios web no confiables sin afectar la configuración principal.
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