Las trampas en el ajedrez presencial no son tan comunes ni sofisticadas como se suele creer. Después de que Magnus Carlsen acusara a Hans Niemann en 2022, surgieron varias teorías sobre cómo Niemann pudo haber hecho trampas sin ser descubierto.
Una teoría popular sugirió que Niemann podría haber ocultado un dispositivo vibratorio dentro de su cuerpo para indicar qué movimientos realizar.
En la práctica, hacer trampa en el ajedrez de alto nivel es relativamente sencillo y normalmente implica que los jugadores revisen discretamente sus teléfonos.
Merenzon, quien participó activamente en la organización del evento Clash of Blames , que contó con medidas avanzadas contra las trampas , describió varios métodos comunes de trampa y cómo los principales torneos de ajedrez garantizan su integridad.
Hans Niemann y Magnus Carlsen se enfrentaron por primera vez desde las acusaciones en septiembre.
“Nuestro enfoque incluye monitorear las señales de radio, la señalización de la audiencia, prevenir robos y asegurarnos de que los teléfonos inteligentes estén prohibidos en el área de juego”, afirmó Merenzon.
“Los dispositivos como los teléfonos inteligentes poseen mayor poder computacional que los humanos, lo que ofrece al jugador que tiene acceso a uno de ellos ventajas significativas”.
El último gran escándalo de trampas que sacudió a la comunidad del ajedrez fue el Abierto de Chicago de 2024, donde se encontró a un competidor usando un teléfono en su regazo durante el juego.
Los incidentes de trampa anteriores, incluidos los del Campeonato Rumano de 2023 y el caso de Igors Rausis en 2019 , involucraron a jugadores que utilizaban sus teléfonos en los baños durante los partidos.
Si bien recientemente ha habido numerosas denuncias de trampas en el ajedrez en línea, los casos confirmados de trampas en persona siguen siendo bastante bajos. Merenzon señaló que su organización no ha detectado ningún incidente de trampas en los torneos de ajedrez mundial.
Sin embargo, las medidas contra el fraude no sólo tienen como objetivo detener a los tramposos.
“El objetivo principal es garantizar que los jugadores se sientan seguros mientras compiten, ya que las preocupaciones pueden alterar su rendimiento y concentración”, añadió Merenzon.
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