Un youtuber español se ha enfrentado a un posible arresto tras ser acusado de difundir tutoriales ilegales sobre la creación de explosivos y armas. El creador de contenidos, conocido como Alberto RH o ‘AlbertoHRom’, ha negado las acusaciones, calificándolas de «injustas».
Alberto, que contaba con 1,3 millones de seguidores, fue detenido por la Guardia Civil en Castro Urdiales, una localidad costera de Cantabria. La operación policial, denominada “Operación Sputnik”, tuvo como objetivo su taller, donde las autoridades afirmaron que producía grandes cantidades de explosivos y armas caseras, incluidos lanzallamas.
Antecedentes del contenido del YouTuber
Alberto, un estudiante de ingeniería industrial de 27 años, lleva más de diez años compartiendo en YouTube sus tutoriales de fabricación de explosivos. Sus vídeos, que incluyen instrucciones para crear termita y pólvora, han atraído millones de visitas. La investigación sobre sus actividades salió a la luz cuando especialistas antiterroristas identificaron su contenido como parte de preocupaciones más amplias relacionadas con el tráfico de armas y explosivos.
Alberto en su taller en la finca familiar.
Preocupaciones por la seguridad pública
Los investigadores expresaron una gran alarma por el taller de Alberto, que se instaló en la finca agrícola de su familia. La Guardia Civil destacó los graves riesgos de explosiones accidentales, lo que presenta peligros inminentes no solo para la vida de Alberto, sino también para el bienestar de su familia y los residentes cercanos.
Además, los agentes de la ley temían que la proliferación de sus tutoriales pudiera fortalecer a las organizaciones criminales a nivel mundial. Durante el allanamiento a sus instalaciones, los investigadores recuperaron más de 20 kilogramos de sustancias químicas destinadas a la producción ilegal de explosivos de alta potencia, junto con equipos digitales relacionados con el ensamblaje de armas.
Consecuencias previas vinculadas a su contenido
Antes de este incidente, uno de los videos de Alberto condujo a una condena en 2022, en la que una persona fue sentenciada a 18 meses de prisión por acceder a sus tutoriales. La investigación en curso sobre Alberto ha dado lugar a cargos relacionados con la fabricación ilegal de explosivos, los riesgos que plantean estos explosivos y los posibles peligros de incendio en regiones boscosas.
Respuesta de Alberto a las acusaciones
En un vídeo de YouTube publicado el 27 de diciembre, Alberto describió con franqueza su angustiosa semana. “Me están acusando de algo súper profundo”, comentó, aunque reconoció que las autoridades efectivamente habían registrado su taller. Sin embargo, afirmó firmemente que la búsqueda reveló que él “no era un terrorista” y que no tenía un laboratorio destructivo.
Alberto enfatizó que el contenido de su video nunca tuvo como objetivo instruir a los espectadores sobre cómo crear explosivos, sino que, según él, su objetivo era entretener y educar. “Creo que es muy injusto”, concluyó, expresando su frustración por la situación.
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